Estas son todas las partes de una zapatilla de running

2022-09-03 02:38:14 By : Mr. Wilson Wu

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Te contamos con detalle todo lo que debes saber sobre la jerga técnica de las zapatillas que usas para salir a correr y así puedas conocerlas al milímetro y elegirlas correctamente

Has buscado entre decenas de modelos cuáles son las mejores zapatillas que puedes comprarte, pero ¿sabes realmente todo lo que deberías sobre ellas? Upper, drop, mediasuela, TPU... seguro que te suenan y los habrás escuchado muchas veces si te gusta correr, pero puede que no sepas qué son concretamente cada uno de estos términos que forman parte de la jerga técnica de una zapatilla de running. Es verdad que aunque veas una simple zapatilla para correr, cada parte tiene un nombre —algunos no fáciles de recordar— y un motivo por el que está ahí.

Por eso, para que no te pierdas nunca más cada vez que tus compañeros de carreras saquen un tema de conversación sobre zapatillas o incluso puedas elegir tus próximas aliadas correctamente sin que sientas la necesidad de comprarlas por su diseño o porque simplemente son bonitas, hemos hecho esta guía definitiva. Para ello, hemos cogido una zapatilla de running y las hemos radiografiado para contarte cuáles son todos los elementos que forman parte de ella: desde la parte superior, pasando por la mediasuela y terminando por su suela.

Para empezar, vamos a por el corte superior. Esta parte de la zapatilla es más conocida como upper y es la que cubre el pie para garantizar un ajuste cómodo y seguro y, al mismo tiempo, proporciona ventilación y estabilidad en la pisada. ¿Qué elementos lo componen?

El tejido del upper suele ser estár formado por una malla de materiales técnicos (con un patrón que aporta fuerza y flexibilidad) o hilos trenzados (nylon, algodón...) que proporcionan una sensación de calcetín suave.

Esta puede tener más de una capa (líneas negras y azules en las de la izquierda). Aporta sujeción y también visibilidad gracias a sus materiales reflectantes.

Toda zapatilla tiene una lengüeta y esta se encarga de proteger el empeine de los cordones y evita que entre la suciedad. Las reforzadas ajustan mejor, pero son más difíciles de poner que las unidas al lateral, conocidas como 'tipo burrito', por ejemplo la de la imagen de abajo.

Los cordones tienen como función principal cerrar y dar un ajuste perfecto al conjunto de la zapatilla. Suelen ser de diferentes formas y compuestos que se entrelazan en los ojales que se sitúan a ambos lados y no es necesario que sean muy largos.

Es la que protege los dedos y debe proporcionarles suficiente espacio, de manera que no rocen entre ellos ni con la zapatilla y se formen ampollas. Y cobra aún más importancia en las zapatillas de trail running porque ayuda a proteger el pie de los obstáculos propios de la montaña como pueden ser piedras, ramas, raíces... por eso suelen estar bastante reforzadas.

También es conocida como talonera, y es una pieza de plástico o de tela que protege el talón y ofrece un soporte total al talón de Aquiles. Puede ser interna o externa.

Es el núcleo de la zapatilla de running y normalmente está fabricado de una espuma parecida a la goma y es la que se encarga de dar amortiguación y retorno de energía. En los años, han ido evolucionando e incluso hay otras tecnologías que forman parte de la mediasuela de una zapatilla, como puede ser la placa de fibra de carbono.

El etilvinilacetato (tanto blanco como gris), es el material estándar desde la década de los 70 por su suavidad, flexibilidad y bajo coste. Desventaja: el frío lo vuelve más rígido y se comprime con el kilometraje, perdiendo su capacidad de rebote.

El poliuretano reacciona menos que el EVA a la temperatura, y dura y rebota más. Pero pesa un 50% más.

Algunas firmas fusionan unas perlas de poliuretano termoplástico para obtener una espuma más flexible, duradera y con mayor rebote que el PU y el EVA. Sin embargo, el TPU pesa más que este.

O lo que es lo mismo, poliéter amida en bloque. Mantiene su flexibilidad y retorno de energía en condiciones frías y es un 20% más ligero que el TPU.

La mediasuela es la que da altura a la zapatilla y la que separa tu pie del suelo y esto es conocido como perfiles. Hay dos tipos: el delantero y el trasero y se mide en mm. Según los milímetros puede ser: maximalista o minimalista. Por ejemplo, el perfil alto en el talón se suele dar en zapatillas de running para entrenar a diario aunque cada vez se ve más en modelos enfocados a la competición con 39 mm las cuales antes solían tener muchos menos. De hecho, la World Athletics reguló esta parte de la zapatilla para que todas tengan hasta un máximo de 40 mm. La diferencia de altura entre el perfil trasero y delantero es el famoso drop de una zapatilla que también se mide en mm.

Es la parte inferior de la zapatilla, generalmente de goma maciza, caucho inyectado con aire o una combinación de ambos. La goma es más duradera, pero el caucho, normalmente en la parte delantera, es más flexible y aumenta la amortiguación. Para asfalto, la suela tendrá partes diferenciadas (una banda más plana con ranuras flexibles) que logren transiciones más suaves en el pavimento. Para trail, llevará un patrón de tacos más agresivo que agarre bien en terrenos escarpados.

Pasarela o caña

Situada entre el talón y la parte delantera, reduce la torsión y proporciona estabilidad.

Redondeado o en ángulo, reduce el impacto y permite aterrizar suavemente.

Esta pieza se encarga de proteger el pie de todos los obstáculos que puedes encontrarte por el camino mientras corres, ya sea por la ciudad o por zonas rocosas o complicadas de una montaña.

Pieza partida que absorbe el impacto del talón sobre el pavimento.

Es el molde del fabricante que imita la forma del pie. Pueden ser curvadas, semicurvadas y rectas. En las zapatillas para correr, la horma suele ser curvada porque proporciona más apoyo al arco del pie. Las de control de estabilidad suelen tener una recta. La mayoría de las zapatillas tienen una semicurvada.

También llamado compensación del talón, es la diferencia de la altura entre la parte delantera y trasera. En la mayoría está entre 8 y 10 mm. Un drop de entre 0 y 4 mm proporciona una posición más natural y lo vemos en las las zapatillas minimalistas o de cinco dedos, pero si es mayor suele resultar mucho más cómodo y suave. Y si quieres hacer cambios a un drop menor debes hacer un progreso para evitar el dolor de tendones o músculos que te lleven a sufrir una lesión.

Es una calza de espuma firme ubicada debajo del tobillo, en la entresuela de la zapatilla. Está hecha de un material más denso, generalmente EVA. Esta pieza se encarga de distribuir la fuerza del pie a medida que corres, reduciendo el impacto en el tobillo y evitando que el pie se gire mucho hacia dentro.

Toda zapatilla incluye su propia plantilla que se coloca en el interior y suele ser de diferentes espesores y compuestos, normalmente perforada para equilibrar el calor interior, y aumenta el confort.

Bandas situadas a los lados de las zapatillas, por dentro de la entresuela. Hacen que la rotación del tobillo y de la rodilla se sincronicen, lo que proporciona soporte y aumenta la eficiencia del corredor. La marca Brooks ha introducido recientemente bandas de guía en varios modelos, incluyendo Adrenaline GTS.

Tecnología incorporada en una zapatilla para ayudar a los corredores con una pisada demasiado pronadora. Es decir, que giran demasiado en el pie hacia adentro en cada zancada.

Se denomina así a la cantidad de rebote o resorte de la zapatilla cuando el pie toca el suelo. Cuanto más alto, mayor sensación de rebotar tendrás. Sin embargo, la capacidad de respuesta de una zapatilla depende también de factores como el peso y la forma de andar de cada corredor.